“No basta el aula y el conocimiento, los estudiantes deben meterse en el bosque, sentir el bosque y así desarrollar su compromiso con el medio ambiente”

Durante los días 25 y 26 de noviembre se realizó en Santiago la Cumbre R, primer encuentro nacional de acceso gratuito que busca impulsar la economía circular, en donde participaron representantes de la sociedad civil, organismos públicos y empresas que se han asociado para afrontar la cada vez más compleja crisis climática que vive el planeta a través de soluciones innovados y modelos de negocios sustentables.

Con más de 43 mil personas conectadas en línea durante ambas jornadas y variados paneles con temáticas sustentables, se llevó a cabo esta importante conferencia proambiental que contó con 46 paneles de conversación en donde intervinieron 165 expositores y expositoras, entre ellas la reconocida antropóloga y directora del Área de Vinculación del Instituto del Medio Ambiente (IDMA), Teresa Montecinos Concha, quien, junto a Eva Soto (directora del Departamento de Ciencias de Ingeniería para la Sostenibilidad de la Universidad de Playa Ancha, UPLA), Nicolas Morales (fundador de Trabajo con Sentido) y Pamela Silva (gerenta de Transformación y Agilidad de Caja Los Andes) formaron parte de la charla titulada “Capital Humano en el Desarrollo Sostenible de Chile” que se efectuó el viernes 26 de noviembre y tuvo lugar en la “Sala Reutiliza” del Edificio Corporativo de Caja de Compensación Los Andes.

Acerca de la temática central de la conferencia, la especialista en Ordenamiento y Gestión Territorial de la Universidad de Chile se refirió en primera instancia al proyecto educativo de IDMA basado en la formación de técnicos para el desarrollo sustentable de Chile y la manera en las personas que se desempeñan en la institución se vinculan con actores externos de manera colaborativa con el fin de contribuir activamente con acciones de sustentabilidad.

“Nuestro principal objetivo -en IDMA- es incorporar el nivel técnico en los distintos espacios de trabajo de organizaciones relacionadas a la sustentabilidad, a través de profesionales que desplieguen las habilidades, conocimientos y competencias adquiridas en torno al sello de nuestra institución que es un compromiso profundo con el medio ambiente y que siempre ha sido inculcado a los estudiantes”, resaltó Montecinos.

Asimismo, la también directora de la OTEC IDMA relevó el espacio de articulación que existe entre el mundo profesional y el técnico para respaldar iniciativas llevadas a cabo por empresas e  industrias con el fin de concretar proyectos de gestión sustentable de recursos naturales y sus respectivos planes de mitigación ambiental, indicando que “todos y todas debemos hacer un aporte desde nuestros espacios de trabajo y estudio para lograr el desafío de alcanzar la sustentabilidad de nuestro planeta y supervivencia de las nuevas generaciones”.

Respecto a las irreversibles consecuencias de la crisis climática y cómo la emocionalidad debe ser un factor fundamental dentro de los procesos educativos de estudiantes de carreras de gestión sustentable, Teresa Montecinos, señaló que “todos sabemos que el tema del cambio climático deprime bastante al ver las estadísticas, la falta de lluvias, el aumento del calor, la muerte de las especies, la complejidad de los ecosistemas y la falta de leyes que constituyen un escenario bastante triste.  Por eso es nuestra obligación el incorporar una dosis de alegría y esperanza a todas la campañas y acciones que se realicen para proteger el medio ambiente mediante el arte, la música y otras disciplinas”.

En la misma línea, la antropóloga resaltó la importancia de la Escuela de Oficios Sustentables (EOS)implementada por IDMA para que personas que realizan distintas actividades sostenibles de manera autodidacta puedan formalizar técnicamente dichos conocimientos y poder mejorar sus carreras laborales y su calidad de vida.

“A través del desarrollo de variados programas de capacitación en oficios efectuados en distintas comunas de Santiago hemos ayudado a muchas personas a perfeccionar destrezas y habilidades bajo una mirada sustentable.  Entregando herramientas y certificaciones que fortalecen y potencias sus trabajos y emprendimientos”, contó Teresa Montecinos.

Finalmente, la antropóloga destacó la formación valórica y experiencial que reciben los y las estudiantes del Instituto del Medio Ambiente como una parte primordial de su instrucción técnica y profesional. “En el sur de Chile tenemos un espacio cerca de Puerto Montt, un lugar maravilloso, en donde anualmente llevamos a los estudiantes durante una semana de trabajo que por un lado abarca el repaso de sus asignaturas teóricas y por el otro es puto trabajo vivencial (…) meterse en el bosque, oler el bosque, conocer la naturaleza desde más cerca y con ello hacer un trabajo de reflexión personal más profundo. Al que se agregan ejercicios de yoga y programas de alimentación saludable con el propósito de dar un paso más allá, saliendo del aula y el conocimiento e ir hacia la transformación personal para incorporar otros elementos de nuestro ser a los procesos educativos”, reflexionó inspirada directora de IDMA.

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