El pasado 29 de junio el ministro de Energía Juan Carlos Jobet junto al ministro alemán, Peter Altmaier, firmaron una alianza con el fin de fortalecer la cooperación de estos países en materia de hidrógeno verde, el llamado “combustible del futuro”.

Ambos ministros se reunieron  para avanzar en la producción y comercialización de hidrógeno verde (H2V) con el objetivo de  facilitar la cadena de suministros entre sí. Además, acordaron analizar proyectos viables conjuntos en grupos de trabajos que se regirán ante el acuerdo inicial de asociación energética establecido en 2019.

Para llevar a cabo todo el proceso, se realizarán reuniones periódicas en que se compartirá conocimiento y experiencias en cuanto a normas y procedimientos de seguridad. También será una instancia para avanzar en el desarrollo de sistemas de certificación de emisiones bajas de carbono, promover el desarrollo conjunto de proyectos de investigación, piloto y de demostración.

Esta alianza busca reforzar la utilización de este combustible ecoamigable y  marca un gran paso para el país en el camino hacia la utilización de energías limpias, el reemplazo de los combustibles fósiles y la carbono neutralidad.

Hidrógeno verde y cómo avanza Chile 

Este combustible verde se produce a partir de agua y energías renovables, por lo que no contamina el planeta. El H2V tiene características que lo transforman en una alternativa energética más prometedora y entre ellas destaca que su producción no emite gases de efecto invernadero ni contaminantes, puede ser usado en todos los sectores que utilicen energía y su producción puede mantenerse mientras se disponga de fuentes de energía renovables.

Durante el mes de mayo, Chile aprobó el primer proyecto de hidrógeno verde. Este proyecto llamado Haru Oni de Highly Innovative Fuels (HIF) consiste en la construcción de una planta de eCombustible en base a H2 verde en la Región de Magallanes.

El proyecto considera la instalación de una planta para la producción de este combustible ecológico, una turbina eólica de 3,4 MW y una línea de transmisión de respaldo de 13 kV. Se espera producir 350 toneladas al año de metanol crudo y 130 mil litros de gasolinas al año.

La creación de esta planta significó un primer paso para alcanzar la meta de la carbono neutralidad al 2050, y continuar en la senda de generar  alianzas, como la de Chile-Alemania, podría ayudar a potenciar este camino, fortaleciendo la utilización de combustibles no contaminantes en nuestro país.